lunes, 26 de mayo de 2014

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Cómo empezar a escribir una novela

¿Cuál es el proceso de escritura de una novela? Sin duda, cada escritor tiene el suyo, pero a continuación os dejamos algunas ideas para empezar a escribir y perseverar hasta finalizar lo empezado.

1. Decide el tema

Lo primero que te preguntará cualquier persona a la que hables de tu novela será "¿De qué trata?". Esa misma pregunta debes planteártela antes de empezar a escribir. Y debes preparar una respuesta sencilla, que pueda explicarse en un par de frases.

2. Elige un lugar

El lugar en el que se desarrolla la historia va a tener una importancia crucial sobre la acción y sobre la forma en que los personajes reaccionan a su entorno. De modo que una de las primeras cosas que debes decidir es en qué lugar van a tener lugar los sucesos que deseas contar. También es el momento de decidor el cuándo, el momento histórico. 

3. Conoce a tus personajes

Aunque algunos se irán desarrollando a lo largo del proceso de escritura (y pueden darte una sorpresa), debes conocer desde el principio quiénes son los personajes principales y cómo interactúan entre sí. Su personalidad, apariencia, manías: cuanto más específico sea lo que sobre ellos sabes, mejor. Preparar un bosquejo concienzudo de los personajes te facilitará mucho la escritura.

4. Divide la historia en tres actos

Dividir la historia en tres partes es una fórmula probada para mantener la estructura de una novela. No hace falta que el texto final refleje ese esquema, pero sí que lo tengas en mente mientras escribes. Te ayudará a mantener el equilibrio y a comprobar que la historia avanza hacia el siguiente segmento.

5. Decide los subtemas

El amor, el odio, el racismo, la homosexualidad, la depresión... Las mejores novelas nos hablan en múltiples niveles, exponen una opinión y su contraria y proporcionan al lector un amplio espectro de ideas sobre las que reflexionar. Antes de empezar a escribir, decide qué temas toca la novela y de qué manera vas a abordarlos, qué perspectivas y puntos de vista puedes incluir.

6. Escribe un resumen de cada capítulo

Basándote en los tres actos en que has divido la novela, prepara un resumen para cada uno de los capítulos que la componen. Se trata de tener una hoja de ruta que te guíe, consignando cómo se llega de la situación A  a la situación B, en qué momento hace aparición un personaje o dónde conviene añadir una vuelta de tuerca que sorprenda al lector.

7. Escribe las primeras líneas

Las primeras frases de un libro pueden decidir si alguien va a continuar leyendo las siguientes mil. Merecen, por tanto, una atención muy especial. Procura que sean atractivas, pero no te agobies: puedes refinarlas durante el proceso de edición.

8. Escribe el final

Tener ya listo el final te servirá como acicate para trabajar hasta llegar a él. Pero además, si sabes cómo empieza y cómo acaba tu novela te resultará más sencillo llenar el espacio vacío que queda en medio de ambos extremos.

9. Empieza por el principio y avanza hasta llegar al final

Esto puede parecer un consejo de perogrullo, pero no lo es. No te pierdas escribiendo de manera desordenada fragmentos que luego tratarás de meter con calzador en el texto principal. En caso de falta de inspiración, recurre a la hoja de ruta y cíñete a lo que en ella habías planeado. Eso te servirá para continuar: si el resultado no te convence, siempre puedes revisarlo más tarde.

10. Edita, edita y edita

Sin duda el proceso de edición es doloroso. Durante el mismo sientes como si estuvieras amputando partes de ti, pero piensa que eso que eliminas son las verrugas. Bajo ellas se encuentra la piel tersa de una maravillosa novela. Así que no tengas piedad.

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